Buenos Aires, Argentina. Del
ciclo, organizado por autoridades del espacio y por el grupo "Pan
Comido" -integrado por jóvenes poetas cordobeses-, participaron María
Teresa Andruetto, Francisco Colombo, Jorge Boccanera (foto) y Eugenia Cabral
entre otros, Emiliano Fessia, director del espacio, señala: "Planeamos
encuentros de formación con docentes, además de seguir profundizando la
propuesta de que todo el territorio donde funcionó el Tercer Cuerpo de
Ejército sea transformado en un Parque Nacional, porque allí se
encuentran los restos de cientos de desaparecidos y porque es el último
pulmón verde que le queda a la Ciudad de Córdoba".
Hace poco un recital de León Gieco en este Centro de la Memoria convocó a unas 15.000 personas-, actividad que se suma a ciclos de teatro y cine, encuentros literarios, de formación política, de organizaciones sociales, además de celebraciones a la Pacha Mama y visitas educativas.
Y recuerda como "un hito" el año 2007 cuando el entonces presidente Néstor Kirchner dispuso que el predio pase a la Comisión Provincial de la Memoria y deje de ser una dependencia militar: "Como siempre decimos en las guías, la conquista de este espacio es una larga lucha por hacer visible lo que funcionó bajo la clandestinidad: el ocultamiento y la impunidad".
"La frase `habitar el grito` -interviene el poeta Juan Stahli, integrante de "Pan Comido"- viene de un verso de la poeta cordobesa Glauce Baldovín: "su cuerpo es el hábitat del grito": "Quisimos tomar esa imagen y darle una vuelta como una propuesta de trabajo. La convertimos en una consigna que permite una mirada activa en la construcción de la memoria".
El ciclo queda así bajo la advocación de Baldovin, poeta legendaria de Córdoba nacida en 1928 y fallecida en 1995, autora de una obra profusa -hace poco se publicó su antología "Poesía inédita reunida"- que sufrió en 1976 la desaparición de uno de sus hijos, Sergio, mientras cumplía el servicio militar".
Interviene ahora Ceferino Lisboa, otro de los integrantes del grupo "Pan Comido", para explicar que el ciclo se propone "acercar al lector aquello que se está produciendo en poesía, con lo cual se produce una retroalimentación; el poeta sale de su trabajo solitario y se conecta con una parte importante de la tarea de escribir, que es encontrarse con el posible lector".
"El objetivo del ciclo -interviene de nuevo Stahli- es "seguir acumulando vida -presencias, voces, ideas- en un lugar tan importante para la historia de nuestra provincia y del país. Y, al mismo tiempo, sacar a la poesía de aquellos lugares de circulación dedicados a que los poetas se lean entre sí".
Respecto al vínculo entre poesía y memoria, señala Stahli: "En el arte, y en la poesía, la memoria es un elemento fundamental.
Muchos hechos significativos de nuestra historia son conocidos hoy por investigaciones históricas y por el arte que los reflejó de distintas maneras".
"En el siglo XX hay una profundización de esa experiencia, multiplicada por los poetas latinoamericanos que fueron protagonistas de su tiempo; como poetas y como luchadores -menciona-. En sus obras siguen vivas muchas de las cosas que necesitamos aprender, para que no vuelvan a pasar nunca".
Una de las particularidades del campo clandestino de detención La Perla, sostiene Fessia, fue su asilamiento geográfico en un campo militar de más de 15.000 hectáreas: "Por allí pasaron unos 2500 detenidos-desaparecidos de todas las propuestas políticas transformadoras, una muestra de todo lo que se quiso exterminar para siempre en nuestra patria".
Además de preservar los edificios como testimonio material del terrorismo de Estado, "buscamos que la interpelación a los visitantes abra la posibilidad de elaborar sus memorias respecto de este período histórico en relación al presente que vivimos".
Y agrega: "Que se rompa aquello de que la dictadura `sólo les pasó a los desparecidos y sus familiares`, ya que la construcción de memorias colectivas es algo activo que incide centralmente en el presente. El gran desafío es ver cómo se relaciona esta lucha de memorias con las luchas políticas actuales, para seguir aportando a un país donde se respeten todos los derechos humanos".
"El tándem poesía y memoria a través de las nuevas generaciones de poetas, va superando ese horror a la militancia y afirma el testimonio de aquellos que transitaron la historia política y cultural de la Argentina en años de dictadura", considera.
"Habitar el grito" inició sus actividades con una charla de Boccanera, un taller a su cargo y una mesa de lectura, y seguirá los días 19 de mayo y 16 de junio con charlas a cargo de Andruetto y Colombo.
El cierre está fechado el 10 de diciembre, con la presentación de una antología producida por los talleristas.
Fuente: Télam.
Hace poco un recital de León Gieco en este Centro de la Memoria convocó a unas 15.000 personas-, actividad que se suma a ciclos de teatro y cine, encuentros literarios, de formación política, de organizaciones sociales, además de celebraciones a la Pacha Mama y visitas educativas.
Y recuerda como "un hito" el año 2007 cuando el entonces presidente Néstor Kirchner dispuso que el predio pase a la Comisión Provincial de la Memoria y deje de ser una dependencia militar: "Como siempre decimos en las guías, la conquista de este espacio es una larga lucha por hacer visible lo que funcionó bajo la clandestinidad: el ocultamiento y la impunidad".
"La frase `habitar el grito` -interviene el poeta Juan Stahli, integrante de "Pan Comido"- viene de un verso de la poeta cordobesa Glauce Baldovín: "su cuerpo es el hábitat del grito": "Quisimos tomar esa imagen y darle una vuelta como una propuesta de trabajo. La convertimos en una consigna que permite una mirada activa en la construcción de la memoria".
El ciclo queda así bajo la advocación de Baldovin, poeta legendaria de Córdoba nacida en 1928 y fallecida en 1995, autora de una obra profusa -hace poco se publicó su antología "Poesía inédita reunida"- que sufrió en 1976 la desaparición de uno de sus hijos, Sergio, mientras cumplía el servicio militar".
Interviene ahora Ceferino Lisboa, otro de los integrantes del grupo "Pan Comido", para explicar que el ciclo se propone "acercar al lector aquello que se está produciendo en poesía, con lo cual se produce una retroalimentación; el poeta sale de su trabajo solitario y se conecta con una parte importante de la tarea de escribir, que es encontrarse con el posible lector".
"El objetivo del ciclo -interviene de nuevo Stahli- es "seguir acumulando vida -presencias, voces, ideas- en un lugar tan importante para la historia de nuestra provincia y del país. Y, al mismo tiempo, sacar a la poesía de aquellos lugares de circulación dedicados a que los poetas se lean entre sí".
Respecto al vínculo entre poesía y memoria, señala Stahli: "En el arte, y en la poesía, la memoria es un elemento fundamental.
Muchos hechos significativos de nuestra historia son conocidos hoy por investigaciones históricas y por el arte que los reflejó de distintas maneras".
"En el siglo XX hay una profundización de esa experiencia, multiplicada por los poetas latinoamericanos que fueron protagonistas de su tiempo; como poetas y como luchadores -menciona-. En sus obras siguen vivas muchas de las cosas que necesitamos aprender, para que no vuelvan a pasar nunca".
Una de las particularidades del campo clandestino de detención La Perla, sostiene Fessia, fue su asilamiento geográfico en un campo militar de más de 15.000 hectáreas: "Por allí pasaron unos 2500 detenidos-desaparecidos de todas las propuestas políticas transformadoras, una muestra de todo lo que se quiso exterminar para siempre en nuestra patria".
Además de preservar los edificios como testimonio material del terrorismo de Estado, "buscamos que la interpelación a los visitantes abra la posibilidad de elaborar sus memorias respecto de este período histórico en relación al presente que vivimos".
Y agrega: "Que se rompa aquello de que la dictadura `sólo les pasó a los desparecidos y sus familiares`, ya que la construcción de memorias colectivas es algo activo que incide centralmente en el presente. El gran desafío es ver cómo se relaciona esta lucha de memorias con las luchas políticas actuales, para seguir aportando a un país donde se respeten todos los derechos humanos".
"El tándem poesía y memoria a través de las nuevas generaciones de poetas, va superando ese horror a la militancia y afirma el testimonio de aquellos que transitaron la historia política y cultural de la Argentina en años de dictadura", considera.
"Habitar el grito" inició sus actividades con una charla de Boccanera, un taller a su cargo y una mesa de lectura, y seguirá los días 19 de mayo y 16 de junio con charlas a cargo de Andruetto y Colombo.
El cierre está fechado el 10 de diciembre, con la presentación de una antología producida por los talleristas.
Fuente: Télam.
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