España ofrece a Haití un programa de identificación genética.

España ha ofrecido a Haití un programa de identificación genética para luchar contra el tráfico de niños, que toma muestras biológicas de los menores que carezcan de familia reconocida y de los padres que denuncien la desaparición de sus hijos. DNA-ProKids, desarrollado por la Universidad de Granada, será explicado el lunes por la secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Soraya Rodríguez.
A través de esta iniciativa, se han podido identificar en un año a más de 200 niños en doce países. El programa consiste en tomar muestras biológicas de todos aquellos menores de 18 años que no tengan familia reconocida y de todos aquellos padres que denuncien la desaparición de sus hijos, explica una nota de la Agencia Española de Cooperación Internacional.
Con estas muestras se hará una base de datos 'ad hoc' que se pondrá a disposición de las autoridades de Haití. El coste de su aplicación se estima en 250 euros/caso, si bien DNA-Prokids lo hará en el caso de Haití de forma gratuita. Desde junio pasado cuenta con una ayuda de 500.000 dólares de la multinacional Life Technologies para ampliar su actividad. El programa tiene además otros patrocinadores privados (BBVA, Fundación Botín-Santander, CajaGranada), así como de la Junta de Andalucía.

Ayuda constructiva.
Por otro lado un grupo formado por dieciocho organizaciones no gubernamentales (ONG) y sociales haitianas abogan por una ayuda humanitaria constructiva tras el terremoto que devastó la capital y otras zonas del país, al tiempo que han criticado el envío de tropas de Estados Unidos. "La ayuda humanitaria masiva es indispensable debido a la amplitud de la catástrofe, pero debe ser constructiva, articulándose con una visión diferente del proceso de reconstrucción", escriben las entidades en una carta pública a sus contrapartes.
ONG haitianas que trabajan en apoyo a áreas rurales y urbanas, asociaciones campesinas y feministas expresaron su deseo de "ver nacer brigadas internacionalistas de solidaridad" implicadas en la defensa de causas como "la lucha por una reforma agraria y de la propiedad de la tierra urbana integrada". Estas brigadas, según las entidades, podrían ayudar en "la lucha contra el analfabetismo y por la repoblación, la edificación de nuevos sistemas universales, descentralizados y modernos de educación y salud pública".
Las ONGs y asociaciones, entre ellas la Plataforma Haitiana por un Desarrollo Alternativo (PAPDA) y el Programa Alternativo de Justicia (PAJ), expresaron su "cólera" y su "indignación" ante "una nueva invasión de 20.000 marines americanos". Para estos sectores, se instrumentalizó la crisis haitiana "para justificar" una operación "que corre el riesgo de convertirse en una nueva ocupacion militar" tras las intervenciones estadounidenses de 1915 y 1994. Denunciaron una "estrategia de remilitarización de la cuenca del Caribe como respuesta del imperialismo americano a la rebelión creciente del pueblo del continente contra el neoliberalismo".