Brasilia, 20 nov (PL). Con la colocación de una escultura de Zumbi dos Palmares, símbolo de la resistencia a la esclavitud en esta nación suramericana, el Museo Afro Brasil, de Sao Paulo, celebra hoy el Día de la Conciencia Negra.
La obra, de 2,2 metros de alto y réplica de la existente en la Plaza da Sé, en Salvador, capital del estado de Bahía, fue donada al museo por su autora, la artista plástica Marcia Magno, refiere la estatal Agencia Brasil desde Sao Paulo.
En la escultura, Zumbi aparece en posición de alerta y porta un arma de defensa, llamada mukwale, símbolo de poder y usada por los grandes guerreros africanos.
Zumbi nació en 1655 en el estado de Alagoas y fue último jefe del Quilombo de Palmares, fundado en 1600 por esclavos fugitivos de un ingenio azucarero de Pernambuco. El líder negro fue capturado, torturado y decapitado en 1695.
El director del Museo Afro Brasil, Emanoel Araujo, señaló que esa escultura representa un ícono de la historia negra del país y resulta muy importante por la relevancia de su autora.
Además de la obra, el museo inaugura este domingo otras dos exposiciones, una de Aurelino dos Santos, denominada Aurelino: La transformación de lo real, de unas 100 pinturas.
La segunda, Jugar con Arte: el Juguete popular del Noreste, cuenta con más de mil objetos como muñecos y vehículos en miniatura.
Durante la clausura este sábado del Encuentro Iberoamericano de Alto Nivel en Conmemoración del Año Internacional de los Afrodescendientes, la presidenta Dilma Rousseff afirmó que la pobreza en Brasil tiene rostro negro y femenino.
De ahí que insistió en la necesidad de fortalecer las políticas públicas de inclusión social de estos dos segmentos de la población.
La mandataria destacó también que la reunión coincidía con la muerte de Zumbi de los Palmares y con los 123 años del fin institucional de la esclavitud en Brasil.
En estos 123 años sufrimos las consecuencias dramáticas de la esclavitud, aseveró Rousseff y añadió que la característica más marcante de la herencia de esclavitud fue la invisibilidad de los más pobres, enfrentada en los últimos años con políticas de inclusión social y distribución de renta.
Datos del censo de población de 2010 reflejan que en Brasil unas 97 millones de personas se declararon negras o pardas, lo que representa el 50,7 por ciento de los 191 millones de brasileños.
Fuente: Prensa Latina.
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