lunes, 15 de agosto de 2011

LA PROTESTA EN ISRAEL SE EXPANDE.


por Aaron Elberg

En la cuarta semana de protesta continua, manifestaron 70.000 personas en casi 20 puntos periféricos del país. En la mayoría de los lugares se cumplieron las expectativas de los grupos organizadores, poniendo como objetivo trasladar las protestas multitudinarias desde Tel Aviv hacia los lugares donde la violencia económica se siente más fuertemente.

Pressenza, Haifa.
El Sábado 13 de Agosto se reunieron en la ciudad de Haifa cerca de 25 mil manifestantes, 15 mil en Beer Sheva, 12 mil en Afula, en Natania 10 mil. Otras manifestaciones se realizaron también en Eilat, Dimona, Beit Shean, Kiryat Shemona, Ramat Hasharon, Hod Hasharon, Nahariya y Petah Tikva. El reclamo generalizado seguía siendo el mismo: “El pueblo reclama justicia social!”.
La expansión de la protesta no fue solo geográfica sino que también temática y sectorial. También en los poblados de la minoría árabe se van asentando campamentos de protesta: en Nazaret, Uhm El Fahem, Sakhnin, Horfeish, Bakha el Garbiya, Yafo y Lod, entre otros. Ayer declaraba Raja Zaatry, desde el palco de la manifestación en Haifa: “Nuestro sufrimiento es distinto, generalmente más grave… pero en definitiva una familia sin techo es una familia sin techo, un niño hambriento es un niño hambriento, y no importa si habla árabe, hebreo, amhárico o ruso. En definitiva, el hambre y la humillación, así como el capital, no tienen nacionalidad ni idioma… Estamos aquí para decir: en esta lucha hay lugar para todos, en esta lucha hay esperanza para todos, esta lucha es de todos!”
El escritor Sami Michael hablo en la misma manifestación y dijo: “Es la primera vez en la historia de Israel que la clase media se conecta con el resto del pueblo y es la primera vez que askenazíes, sefardíes, árabes, judíos, musulmanes, cristianos, bahai, negros y blancos se unen en la lucha común”.
La cantante Ahinoam Nini (Noa) dijo en la manifestación en Beer Sheva: “Esta es una protesta política llamando a la gente digna a pensar, organizarse e invertir tiempo y recursos, movilizándose de todo modo posible por una nueva visión. Por la esperanza de dos mil años: vivir en libertad. Libres de la esclavitud económica, social, religiosa, mental y política. Ser un pueblo de ciudadanos iguales ante la ley, ciudadanos con igualdad de oportunidades que viven en paz con sus vecinos y consigo mismos. No es una protesta, es el despertar de una nación de la ilusión de la pesadilla a la realidad de la esperanza”.

0 comentarios: