Como ejemplo, Mujica dijo al semanario Búsqueda que "las reuniones y los acuerdos que estamos teniendo con Brasil ahora, van a repercutir muchos años" y agregó: "alguna gente se va a asustar del nivel al que vamos a llegar de libre tránsito de mercaderías, de personas y de todo".
Tras aclarar que Uruguay no perderá por ello independencia, señaló la necesidad de compensar así las asimetrías que el país tiene con otro importante vecino: Argentina. Necesitamos -indicó- la presencia de alguien que compense las brutales diferencias que hay.
En otro orden, Mujica planteó: "Si de algo estoy convenido es que los Estados van a ser cada vez menos independientes y cada vez más acotado su poder por una malla de acuerdos internacionales, que naturalmente tendrán su centro en las sociedades más fuertes y desarrolladas".
El mandatario uruguayo de 77 años de edad visualiza en el futuro "un mundo de fronteras nacionales más permeables y porosas", según declaró a Búsqueda y agregó que "inexorablemente habrá mayor movilidad de la población y una tendencia cada vez más acentuada a viajar por trabajo".
Ante otra pregunta sobre el Uruguay del futuro, Mujica respondió así: "Lo que se viene es la lucha por el agua dulce. Esta zona está llena de agua. Cuando uno mira los mapas, la diferencia con otras zonas del mundo es brutal".
Si Uruguay obedece los mandatos que va a imponer la economía, sostuvo, va a ser un país desarrollado por un camino que los industrializadores de hoy ni siquiera sueñan. La industrialización va a ser guardar agua y usarla.
Mujica debe viajar al mediodía de mañana a España para la Cumbre de Cádiz, tras la cual visitará otras comunidades autónomas y, en Madrid, se entrevistará con el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, y también con el rey Juan Carlos, entre otras actividades.
Fuente: Prensa Latina
0 comentarios:
Publicar un comentario