Las FARC ratificaron hoy que buscan marcar el pulso del diálogo por la paz que mantienen con el gobierno de Colombia en La Habana, Cuba, al hacer un nuevo pronunciamiento, en el que afirmaron que trabajan "con el arma poderosa de la verdad".
A diferencia de los negociadores de parte del Ejecutivo de Juan Manuel Santos, que nunca hablan con la prensa, las FARC leyeron otro comunicado, en el inicio de la tercera jornada de conversaciones, mientras en Colombia se registraron algunos combates menores pese a la tregua unilateral anunciada por los insurgentes.
"Iván Márquez", número dos de las FARC y jefe de los negociadores en el diálogo, afirmó que están "trabajando duro" en La Habana, "haciendo uso de un arma poderosa que es la verdad".
"La verdad pura y limpia es la mejor manera de persuadir", dijo el guerrillero a su llegada al Palacio de Convenciones de la capital cubana, escenario de las negociaciones iniciadas este lunes, reportó la agencia de noticias EFE.
Por tercer día consecutivo desde que arrancaron las charlas, los negociadores del gobierno no hicieron declaraciones a los medios, mientras se conocieron las primeras imágenes de las reuniones, en las que se puede ver a las delegaciones completas, con 10 integrantes cada una, frente a frente, y en las cabeceras de la mesa los delegados de Noruega y Cuba como garantes.
En el video se ve cómo el diálogo se mantiene serio, sereno y en calma, mientras todos toman apuntes de los acuerdos o avances que se vayan logrando, reseñó Radio Caracol.
En una de estas imágenes entregadas por el gobierno cubano también se ve una figura en cartón de Simón Trinidad, ubicado allí de manera simbólica debido a que el guerrillero cumple condena de prisión en Estados Unidos.
Otro contacto con la prensa de parte de las FARC estuvo a cargo de la guerrillera "Viviana Hernández", que leyó un comunicado en el que la organización criticó al gobierno de Santos por su controvertida propuesta de reformar el fuero militar.
En el texto, las FARC acusaron a las fuerzas de seguridad de "chantajear" y presionar a la familia de una guerrillera para intentar dar con el paradero de un líder insurgente, con amenazas de quitarle la custodia de sus hijos menores de edad.
Es un tipo de actos que "se pretende convertir en norma constitucional con la ampliación del fuero militar", aseguró Hernández, que consideró esas actitudes como "expresiones de un modelo de Estado que el pueblo rechaza".
El gobierno de Santos presentó en marzo al Congreso un cuestionado proyecto de enmienda constitucional para reformar el fuero militar, con la idea, según el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, de eliminar "zonas grises" que actualmente crean colisiones entre la justicia ordinaria y la castrense.
La iniciativa causó críticas de asociaciones de derechos humanos en las últimas semanas, entre ellas de Human Rights Watch (HRW) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Hernández leyó el comunicado ante los medios internacionales poco instantes antes de que la delegación gubernamental presidida por Humberto de la Calle entrase al Palacio de Convenciones de La Habana.
El gobierno colombiano ya señaló en varias ocasiones que quiere llevar a cabo las conversaciones "con discreción" y criticó a las FARC por sus pronunciamientos públicos y entrevistas con medios internacionales en las semanas posteriores al anuncio del proceso de paz.
No se trata de "un concurso de oratoria", enfatizó De la Calle al llegar el domingo a La Habana con su delegación. Al mismo tiempo, el equipo gubernamental aseguró que implementará mecanismos para mantener informada a la opinión pública de los avances del diálogo.
Desde Bogotá, en tanto, se supo que el Ejército confirmó que ya cesaron los combates con las FARC en una región del sudoeste del país, mientras fuentes municipales de la zona señalaron que los últimos choques tuvieron lugar el martes, cuando ya estaba en vigor el alto el fuego decretado unilateralmente por la guerrilla hasta el 20 de enero.
Fuente: Télam
A diferencia de los negociadores de parte del Ejecutivo de Juan Manuel Santos, que nunca hablan con la prensa, las FARC leyeron otro comunicado, en el inicio de la tercera jornada de conversaciones, mientras en Colombia se registraron algunos combates menores pese a la tregua unilateral anunciada por los insurgentes.
"Iván Márquez", número dos de las FARC y jefe de los negociadores en el diálogo, afirmó que están "trabajando duro" en La Habana, "haciendo uso de un arma poderosa que es la verdad".
"La verdad pura y limpia es la mejor manera de persuadir", dijo el guerrillero a su llegada al Palacio de Convenciones de la capital cubana, escenario de las negociaciones iniciadas este lunes, reportó la agencia de noticias EFE.
Por tercer día consecutivo desde que arrancaron las charlas, los negociadores del gobierno no hicieron declaraciones a los medios, mientras se conocieron las primeras imágenes de las reuniones, en las que se puede ver a las delegaciones completas, con 10 integrantes cada una, frente a frente, y en las cabeceras de la mesa los delegados de Noruega y Cuba como garantes.
En el video se ve cómo el diálogo se mantiene serio, sereno y en calma, mientras todos toman apuntes de los acuerdos o avances que se vayan logrando, reseñó Radio Caracol.
En una de estas imágenes entregadas por el gobierno cubano también se ve una figura en cartón de Simón Trinidad, ubicado allí de manera simbólica debido a que el guerrillero cumple condena de prisión en Estados Unidos.
Otro contacto con la prensa de parte de las FARC estuvo a cargo de la guerrillera "Viviana Hernández", que leyó un comunicado en el que la organización criticó al gobierno de Santos por su controvertida propuesta de reformar el fuero militar.
En el texto, las FARC acusaron a las fuerzas de seguridad de "chantajear" y presionar a la familia de una guerrillera para intentar dar con el paradero de un líder insurgente, con amenazas de quitarle la custodia de sus hijos menores de edad.
Es un tipo de actos que "se pretende convertir en norma constitucional con la ampliación del fuero militar", aseguró Hernández, que consideró esas actitudes como "expresiones de un modelo de Estado que el pueblo rechaza".
El gobierno de Santos presentó en marzo al Congreso un cuestionado proyecto de enmienda constitucional para reformar el fuero militar, con la idea, según el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, de eliminar "zonas grises" que actualmente crean colisiones entre la justicia ordinaria y la castrense.
La iniciativa causó críticas de asociaciones de derechos humanos en las últimas semanas, entre ellas de Human Rights Watch (HRW) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Hernández leyó el comunicado ante los medios internacionales poco instantes antes de que la delegación gubernamental presidida por Humberto de la Calle entrase al Palacio de Convenciones de La Habana.
El gobierno colombiano ya señaló en varias ocasiones que quiere llevar a cabo las conversaciones "con discreción" y criticó a las FARC por sus pronunciamientos públicos y entrevistas con medios internacionales en las semanas posteriores al anuncio del proceso de paz.
No se trata de "un concurso de oratoria", enfatizó De la Calle al llegar el domingo a La Habana con su delegación. Al mismo tiempo, el equipo gubernamental aseguró que implementará mecanismos para mantener informada a la opinión pública de los avances del diálogo.
Desde Bogotá, en tanto, se supo que el Ejército confirmó que ya cesaron los combates con las FARC en una región del sudoeste del país, mientras fuentes municipales de la zona señalaron que los últimos choques tuvieron lugar el martes, cuando ya estaba en vigor el alto el fuego decretado unilateralmente por la guerrilla hasta el 20 de enero.
Fuente: Télam
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