“Yo hoy tengo 24 años y La Educación Prohibida nace cuando yo tenía 21; principalmente por mis ganas de juntar la herramienta que era la producción audiovisual y la comunicación –que era lo que yo quería hacer– con el tema que más me había interesado desde chico, que era la educación”, señala Germán.
“Hoy en día no eran necesarias tantas cosas para hacer una película y para comunicar una idea ; y juntamente las ideas que yo tenía sobre la educación no era yo el único que las tenía (habían muchas personas que las compartían). Ahí se juntaron muchos estímulos que me llevaron a hacer esta película de esta manera, que no solo es una película sobre un tema muy particular y muy polémico; sino también la forma en la que está hecha es diferente”.
“Internet nos ha abierto las puertas para que esta Nueva Sensibilidad, que antes tenían muy pocos (o que por lo menos muy pocos podían llegar a expresar), hoy en día esté de alguna forma democratizada”.
“Solamente podemos recibir los cambios que vengan en los nuevos paradigmas (no solo en la educación sino en otras áreas), a través de esta Nueva Sensibilidad; a través de gente que esté pensando o que esté sintiendo que son necesarias otras formas –no solo de educar– sino de relacionarnos con el medio ambiente, de relacionarnos con los otros, de consumir, de pensar la organización social, de pensar la organización política. Estamos como en un momento en que esta Nueva Sensibilidad va a ser el semillero, el comienzo de movilizaciones muy grandes en el futuro; y creo que La Educación Prohibida es una de esas experiencias”.
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