Alumnos de Ciencias Económicas colaboran con el Programa de Apoyo a Microemprendedores de la Economía Social.

Se trata de proyectos relacionados en mayor medida con la actividad textil y que recibirán asesoramiento de parte de alumnos que brindan 30 horas de servicio a la comunidad para elaborar un trabajo final. De esta manera, se mejora la calidad de los emprendimientos en el marco de ese programa municipal.
Mediante un acuerdo concretado entre la Municipalidad –a través de la Secretaría de Desarrollo Social- y la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Mar del Plata, un grupo de alumnos están brindando asesoramiento a iniciativas beneficiarias del Programa Municipal de Apoyo a Microemprendedores de la Economía Social.
"Cuando se implementó este programa se le dio un subsidio de hasta 3 mil pesos a 63 emprendedores de la ciudad que ya estaban trabajando", señaló al respecto Virginia Sívori, de Desarrollo Social de la comuna. "A partir de eso se fueron generando reuniones mensuales. De allí surgió la necesidad de asesoramiento para poder progresar en el emprendimiento, en cuestiones relacionadas con la capacitación", informó.
Sívori remarcó el intercambio que se dio con la Universidad a partir de algunas materias que podían servirle a estas iniciativas. "Por otro lado, la Facultad de Ciencias Económicas tiene una materia llamada Prácticas Comunitarias, en la que los alumnos prestan 30 horas de servicio a la comunidad, para luego hacer un trabajo final y poder aprobar la materia. Hicimos la conexión desde la Secretaría de Extensión de la Facultad de Ciencias Económicas y entonces los alumnos pasaron a asesorar a los emprendedores", aseguró.
"Basicamente, lo que hacen es acortar la brecha de información. Hay muchas cosas que están dando vueltas y que a los emprendedores no les llegan. Entonces, los alumnos se informan y después le brindan todo el asesoramiento necesario, como por ejemplo en el tema impositivo."
Por último, la funcionaria trazó un perfil de los emprendedores que están dentro del Programa Municipal de Apoyo. "La mayor cantidad de estas iniciativas tienen que ver con la actividad textil y con una fuerte impronta social: son familias en situación de vulnerabilidad social y casi todas en algún proceso de desocupación a partir de la crisis del 2001. La idea es coordinar este programa municipal de apoyo con las prácticas comunitarias de la Universidad", concluyó.