Un fallo judicial reconoce a la fumigación de agroquímicos como un delito.

Un tribunal de la provincia de Córdoba, en Argentina, condenó a 3 años de prisión no efectiva a un productor rural y al piloto que realizaba las fumigaciones aéreas ilegales. Son las primeras condenas penales por fumigaciones.


La sentencia condenó al productor rural Francisco Parra por contaminación ambiental penada por la Ley de Residuos Peligrosos. El piloto Edgardo Pancello fue hallado "coautor del delito de contaminación ambiental".
Sin embargo, el productor Jorge Gabrielli fue absuelto por no tener suficientes pruebas en su contra.
La sentencia llega después de una década de denuncias por parte de organizaciones vecinales y ambientalistas contra la contaminación en esa zona del país.
Se trata del llamado Barrio Ituzaingó Anexo, un poblado de 5 mil habitantes ubicado en las afueras de la capital de la provincia argentina de Córdoba.
El fallo entregó las primeras condenas penales por afectar la salud de una población por el uso ilegal de químicos durante fumigaciones aéreas.
Los habitantes de ese territorio lindero con áreas rurales denunciaron el aumento de los casos de cáncer y malformaciones en niños a partir de la producción intensiva de soja y las fumigaciones con agroquímicos de esas plantaciones.(PÚLSAR)