domingo, 4 de julio de 2010
MANUAL DEL EDUCADOR DE LA NO-VIOLENCIA.
Por Pía Figueroa.
Durante el mes pasado el Consejo Provincial de No-violencia en la Educación, con más de 20 Escuelas de la Provincia de Mendoza y la Fundación Da Vinci, cerró un ciclo de trabajo diseñando los Protocolos de Convivencia con un enfoque de No-violencia Activa. Este material servirá al sistema educativo provincial, como “Manual del Educador de la No-violencia".
Pressenza, Mendoza. Daniel Robaldo, Presidente de la Fundación Da Vinci, manifestó: “Ha sido más de un año de trabajo con las Directoras de muchas escuelas, ellas lo escribieron en base a las experiencias implementadas en sus propias instituciones. Desde el día de la No-Violencia, el 2 de Octubre del 2008, en el que más de 30 Directoras iniciaron este proceso de cambio de enfoque en sus visiones.”, luego agregó, “en este momento hay un trabajo sistemático y metodológicamente registrado, que permite al docente experimentar en si mismo los cambios que se proponen desde el Nuevo Humanismo Universalista.”
El trabajo sistemático a que se hace referencia es producto de los acuerdos entre el Gobierno Escolar Provincial, las autoridades Municipales y esta ONG con un fuerte trabajo en el campo educativo en todos los niveles y orientada a la implementación de un Modelo Educativo basado en las ideas y prácticas de la No-Violencia. Un sistema de prácticas educativas que avanza hacia el cambio social, pero en función de transformaciones personales en el docente y el estudiante simultáneamente.
Luego Robaldo adelantó: “las situaciones de violencia en las instituciones educativas son cada día mas complejas y los gobiernos locales se encuentran sobrepasados, ya que los enfoques burocráticos no se adecuan a los tiempos de los acontecimientos actuales. Por eso es importante el trabajo en la base social, entre todos los actores de esta crisis, ahora hay que plasmarla en Ordenanzas, Leyes y Reglamentaciones que den una mayor participación y legitimización social”.
Ante la pregunta de cómo impactan estos Protocolos de Convivencia basados en experiencias de No-Violencia en estas Escuelas manifestó: “es importante el trabajo en el aula, el docente está más atento y no realiza acciones de tipo “premios y castigos”, está más orientado al trabajo por Proyectos con una fuerte impronta social, es decir de un alto nivel de significación para el estudiante, y trabaja transversalmente con todas las áreas, esa es la lucha No-Violenta, llevando lo mejor de sí mismo, a los lugares donde la sociedad lo necesita, pero fundamentalmente, enseñando a organizarse integralmente. Por otro lado”, agregó *“contamos con un Comité Científico compuesto por destacados investigadores que analizan nuestros avances”.
Las escuelas que llevan adelante estos proyectos realizan marchas pacíficas y exposiciones muy participativas de la comunidad local que la rodea. Entre las escuelas existe un Protocolo de Apoyo mutuo ante casos de crisis o violencia específicas. En cada escuela se organizan grupos de estudio y Talleres respecto a temas que facilitan el conocimiento de si mismo.
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