martes, 11 de mayo de 2010

Potenciar a Mar del Plata como una ciudad de cine.


Con la participación de un importante grupo de realizadores y gente relacionada con el cine, se llevó a cabo este domingo en el marco del 6º MARFICI un Encuentro de realizadores marplatenses. Durante la reunión, coordinada por el realizador Miguel Monforte y el profesor Ricardo Aiello, se lograron coordinar algunas pautas que de ahora en más deberán ser puestas en práctica para lograr que la ciudad aproveche las potencialidades que tiene como ciudad de cine.
En el comienzo, los moderadores explicaron las pautas del encuentro, y luego se generó un interesante intercambio con los participantes, a partir de preguntas que fueron propuestas como puntos a tener en cuenta. Una de ellas era cómo mejorar la difusión de las obras marplatenses y de qué manera se puede la ciudad convertir en un polo de producción, más allá de ser un estupendo set de filmación para producciones que llegan de Capital Federal.
“Este encuentro es acerca de las potencialidad que tenemos como ciudad, ya que superamos los 700 mil habitantes y tenemos en cuenta las ciudades aledañas. Entonces, cómo convertirnos en un polo de producción, creciendo todos juntos, respetando la variedad, pero teniendo un frente común para competir, para hacer trabajos, para conocernos. Un poco la idea de todo esto es ir creciendo, más allá del espacio que propone el MARFICI”, señaló Aiello.
Los moderadores destacaron algunos puntos que favorecen a Mar del Plata, como por ejemplo el hecho de contar todavía con salas de cine y de ver mucho cine a partir de los diversos festivales, muestras y ciclos que se realizan aquí. Así se resaltó que en la ciudad se ha tenido la fortuna de ver mucho más cine que en otras ciudades del interior y que, por la cantidad de festivales que se realizan, se encuentra muy cerca de Buenos Aires.
Por su parte Monforte destacó que hubo y hay en la ciudad algunas escuelas de cine, que si bien para algunos son el paso previo para estudiar en Buenos Aires, permiten una formación local. También que hay cursos gratuitos de distinta índole y que hay ciclos interesantes como el que se realiza en la Villa Victoria y también lo que ocurre con el programa provincial de las Video Factorías “que trabajan en los barrios y en el centro, algo que es privilegio de esta ciudad donde en principio gratuitamente puede formarse gente”.
El realizador resaltó que “de a poco fuimos dejando de ser una locación, empezamos a tener la posibilidad de filmar y trabajar en propuestas que vinieron de afuera, muchas publicidades”. Allí señaló que los profesionales que vienen de Buenos Aires aseguran que los técnicos marplatenses no están del todo capacitados, y ahí habría que ver “cómo nos podemos potenciar, porque se sabe que ellos se ahorran mucha plata cuando contratan gente de acá”. Se habla de unos 60 comerciales por año que se hacen en Mar del Plata
También se resaltó la necesidad de que los realizadores locales participen de las propuestas que surgen: explicó que la Municipalidad realizó un concurso, que premiaba con $ 7.000 al mejor guión para la realización de un corto, y sin embargo sólo se presentaron cuatro trabajos. También, se sorprendió Monforte, que quienes lo acompañaban en el jurado no sabían leer un guión. Monforte señaló que los realizadores se deben preocupar por exigir que la gente que se encarga de decidir en estas cuestiones esté mejor formada.
Se mencionó además que no sólo el crecimiento de lo audiovisual en la ciudad está relacionado con la producción, sino que además comienzan a aparecer blogs, sitios de crítica, programas de radio, medios gráficos que dedican su espacio al cine, a discutir sobre cine y a darles un espacio a todas estas propuestas. Por eso sería necesario que se conozcan todos estos lugares, como para ampliar la difusión que los realizadores marplatenses tienen para su obra. “Son intentos en la ciudad y tenemos que estar enterados que todo esto se produce. Creo que a partir de ahí todos nos podemos favorecer para que esto crezca”, dijo Monforte.
Durante el encuentro, el realizador destacó que otras de las cuestiones que deben tener en cuenta los realizadores es estar al tanto de los espacios de difusión y, también, respetar el trabajo de los demás. “Desde hace años generamos espacios e invitamos a los otros realizadores a que participen, hay una muestra de cortos marplatense que se lleva a varias provincias. Pero cuando hacemos las convocatorias no recibimos materiales, incluso hay que ir a buscarlos a la casa. O en el caso de los festivales tampoco ven lo que hacen los demás. Me parece que es una falta de respeto importante ver sólo mi corto y después irme. Es algo que se da y hay que señalarlo”.
Antes de dar el paso al intercambio de opiniones, Aiello remarcó la idea de que a partir de ahora y luego de este encuentro se vea cómo mejorar “las potencialidades que tenemos, cómo podemos crecer, cómo volvernos fuertes, y cómo podemos conocernos. Un poco la idea es intercambiar datos para salir cada uno de su propuestas individuales y hacerlo todo más colectivo”.
Dada la variedad de participantes del encuentro, se dio un interesante intercambio. Había allí realizadores, pero también gente de prensa y quienes trabajan con Internet. De ello, surgió la posibilidad de armar una base de datos con material local, y aprovechar un posible sitio de realizadores audiovisuales marplatenses para utilizarlo como trampolín de difusión a través de Internet.
Además, que este sitio aglutine allí datos personales de todos aquellos que forman parte del mundo del cine en la ciudad, como para saber a qué profesionales se pueden convocar en el caso que se necesite filmar un comercial o cualquier otro tipo de producción. También, se apostó a obtener un espacio físico que sirva para archivar todos los materiales, desde videoclips, hasta cortos, medio y largometrajes.
Más allá de que se hicieron notar y no se disimularon las dificultares presupuestarias con las que se cuentan, o la falta de apoyo que se observa habitualmente a lo local, el Encuentro de realizadores marplatenses brilló por su ausencia de pesimismo, alumbrando entre todos, amén de las diferencias existentes, una serie de ideas para mejorar no sólo la calidad de las producciones, sino también la difusión de estos materiales y su proyección fuera de la ciudad.

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